Forma parte de nuestro ADN editorial: la autopublicación no consiste en maquetar e imprimir… ¡QUE NO! La editorial Hebras de Tinta huye como del fuego de las plantillas prefabricadas a la hora de diseñar y maquetar una obra. Es más, cuanto más compleja es la maquetación de una obra, más nos entusiasmamos en el trabajo.

Con demasiada frecuencia oído que la maquetación de una obra es una cuestión puramente técnica y que responde sencillamente al uso de unos comandos informáticos. Nada más lejos de la realidad… la maquetación de una novela, por ejemplo, responde a un diseño global de la edición, que tiene relación con el tipo de texto, su extensión, la dificultad que pueda tener el lector al encerrarse en su lectura, con las cubiertas y un largo etc.

Por eso, en la Hebras de Tinta comenzamos cada maquetación desde cero y por eso, la maquetadora habla ancho y tendido con el editor acerca de tema de la novela, su agilidad lectora, el tipo de lector al que va dirigida, etc.

No es lo mismo una novela de trescientas páginas de una novela dirigida a jóvenes que una novela histórica dirigida a lectores mayores. No es igual la maqueta de un poemario que “versa” sobre el amor que uno que “versa” sobre la solidaridad hacia los más desfavorecidos. ¡QUE NO!

Nuestra política, además, es sumar al escritor o escritora a la labor de la maquetación, por eso le enviamos pruebas, tipos de fuentes, le mostramos cómo va quedando el aspecto de su obra mientras va creciendo en el diseño general de la edición.

Es cierto que ello lleva más horas de trabajo, pero también es verdad que el autor disfruta con nosotros del proceso de edición de su obra y eso… no tiene precio; aunque sí un valor incalculable para los que estamos enamorados de la edición.