Desde el principio…

Parece que fue ayer, pero no, ya hace años que conocemos a Paloma Alonso, autora de cuatro novelas y un libro de relatos publicados en la editorial Hebras de Tinta, más otro libro de relatos que estamos en proceso de publicar este mismo año.

Y desde entonces, desde el primer día, hubo un flechazo de sintonía, de esa que hace posible que… ¡siempre nos alegremos de vernos, escucharnos y… escribirnos! Nuestro editor, Paco Melero, presume de mantener con Paloma Alonso un “romance literario” a cuya cita acuden los dos, habitualmente, todos los viernes con un ratito de teléfono. De hecho, nuestro editor cuelga un gracioso cartel en la puerta de su despacho que luce así: ¡Paloma! (ya sabemos que los “tortolitos” andan sin rumbo paseando por su conversación de los viernes… y no molestamos).

¿Por qué sabemos que es una buena novelista?

Cuando hemos publicado la obra de Paloma, cualquiera de sus novelas y relatos (¡Ni lo sueñes!, ¡Aplauso!, Te veré el lunes, No hay quinto malo, Una hora de silencio. Sesenta minutos de nostalgia) hemos recibido en seguida los mensajes de los lectores, acumulando comentarios sobre todo acerca de lo amena que es su lectura, lo mucho que se han divertido y la capacidad de la escritora para hacer que el lector se mimetice con los personajes.

En el caso de su última novela, Una hora de silencio. Sesenta minutos de nostalgia, estos comentarios de lectores se han multiplicado a lo largo del verano; siendo el más repetido aquel que incluía las frases: “No podía dejar de leer…”, “Estaba deseando cada día llegar del trabajo para continuar leyendo…” Por supuesto, la editorial Hebras de Tinta se derretía cada vez que nos llegaba uno de estos comentarios.

Por tanto, y contestando a la pregunta de por qué sabemos que es una buena novelista, contestamos que porque gusta a sus lectores, y mucho, muchísimo.

Además, sabemos que escribe muy bien

Son cinco obras publicadas, todas en Hebras de Tinta, y una más que estamos editando, así que no hay espacio de blog que resista escribir en su justa medida sobre cada una. Por eso nos remitimos a su última novela, UNA HORA DE SILENCIO. SESENTA MINUTOS DE NOSTALGIA, para decir que contiene una trama viva, audaz, divertida, con una mujer como protagonista (que al mismo tiempo es antagonista de sí misma). Paola Santana, que así se llama, va relatando su vida sin dejarse nada, honesta, sincera al medir sus errores y aciertos por igual por tratarse de una misma vida donde estos se experimentan (sin justificaciones, sin dar ni pedir explicaciones). La protagonista es una mujer sensible, descarada, libre… pero sobre todo es una mujer viva. Tan viva que ni siquiera responde ante sí misma y la carga biográfica que va acumulando con los años no es otra cosa sino la mano que la impulsa a continuar mirándose a sí misma como su mejor espectadora (sin juzgarse, sin hacerse daño… prohibiéndose estar viva sin vivir).

QUERIDO LECTOR: si en este momento estás buscando una buena novela… lee esta (de verdad)

En la editorial Hebras de Tinta disponemos de ejemplares, pídelos a través de esta web: